domingo, 27 de enero de 2013

Cuando encuentras a alguien con el que no te importa hacer todas las chorradas del mundo, cuando te da igual que te vea hundida o rebosante de alegría, cuando no piensas lo que dices y no te preocupas de lo que piensa de ti, cuando sobran las sonrisas y a veces también las lágrimas, cuando harías cualquier cosa por verla feliz y matarías a quien le hiciera llorar, cuando la vergüenza se queda a un lado, cuando eres capaz de contarle cualquier cosa, cuando sabes que no será fácil pero te da igual. Cuando encuentras a alguien así, como ella, no la sueltes nunca.
 





 

miércoles, 16 de enero de 2013

Far away.


Sé que suena a tópico, sé que va a sonar a despedida pero quizás ya es hora de caer en lo típico de una vez por todas, y es que hasta ahora mientras mas me alejo de lo normal mas cambios sufre mi vida. He pensado en tomarme un tiempo, en despejarme, en alejarme de la realidad, he pensado en no pensar en ti y me he dado cuenta de que si lo consiguiera, sería la persona más feliz del mundo. 
Sabes que consigo todo lo que quiero, lo complicado es querer ciertas cosas. 
La verdad es que hay varias razones de peso por las que guiarme y aunque a veces parezcan desaparecer, ya he decidido que camino tomar, mi orgullo, mi cabezonería, mi determinación y yo ya nos hemos embarcado y probablemente esa sea una mezcla imparable. Espero que lo sea.
Quiero con todas mis fuerzas sentirme lejos y quiero de una vez por todas estar cerca de lo que dejé aparcado hace tanto tiempo. Quiero tener un sí por respuesta ante todo lo que me proponga y sé que solamente yo puedo responder a mis preguntas. Quizás no entiendas una palabra de lo que haya dicho, quizás me hayas calado desde el principio como, según tú tan bien se te da hacer pero eso es algo que ya no está en mi punto de mira, esa prioridad ya no es de las mías y ese detalle ya no conforma todo aquello por lo que me dejo llevar. 
He llegado a la conclusión de que no es mentira eso que dicen de luchar por lo que quieres, pero a veces no significa volverte loco con un concepto, no significa correr hasta perder el aliento ni demostrarte que eres sobrehumano. A veces solo se trata de darte un respiro, de ser capaz de ver con claridad lo claro e incluso lo oscuro. 
A veces, luchar no significa pelear, significa crecer.

martes, 15 de enero de 2013

,



  1. Tu risa.
  2. Tus ojos.
  3. Tu voz.
  4. Tus buenos días.
  5. Y tus buenas noches.
  6. Tu calor.
  7. Tu amor.
  8. Tu manera de hacerme enfadar.
  9. Tu historia.
  10. Tus manos.
  11. Tus abrazos.
  12. Tus orejas.
  13. Tu olor.
  14. Tu sabor. 
  15. Tu mirada.
  16. Tu piel.
  17. Tus lunares.
  18. Tus tonterías.
  19. Tus mordiscos.
  20. Tus chistes malos.
  21. Tu sensibilidad.
  22. Tu locura.
  23. Tu frustración.
  24. Tus maneras.
  25. Tu humo.
  26. Tu confianza.
  27. Tu boca.
  28. Tu espalda.
  29. Tu cintura.
  30. Tu vergüenza.
  31. Tu espontaneidad.
  32. Tus ganas.
  33. Tus subidas.
  34. Y tus bajadas.
  35. Tu sonido.
  36. Tu tacto.
  37. Tus "hoy no estoy para nadie".
  38. Y tus "hoy sólo estoy para ti".
  39. Tu ser. 
  40. Mi ser cuando estoy contigo.
  41. Tus mejillas.
  42. Tus coloretes.
  43. Tu pecho.
  44. Tu ausencia.
  45. Tu felicidad.
  46. Tu ilusión.
  47. Tus gestos.
  48. Tus cosquillas.
  49. Tu sonrisa.
  50. Mi sonrisa al pensarte.
  51. La perfección de tus defectos.
  52. Todo tú.

miércoles, 9 de enero de 2013

Myself.

Aprendí que quien te quiere te busca, que amar es cosa de dos, que no por decir más se siente más. También aprendí que, una vez que te enamoras, jamás consigues olvidar, que nadie llenará ese vacío que me dejaste tras tu sonrisa. Tras tus gestos y tu brillo en los ojos cada vez que me miraba en ellos. No lograrán igualar ni por asomo el vuelco que me daba el corazón cada vez que te acercabas, ni las ganas de ti cada vez que te pensaba. Nadie podrá crearme jamás la adicción que tenía hacia ti. A tu olor, a tu sabor... A tu calor. Tampoco nadie podrá igualar jamás el número de sonrisas que fuiste capaz de sacarme, tan sólo con respirar.
Llegué a odiarte por hacer que me convirtiera en lo que he sido durante meses. Pensándote cada puto segundo y arrepintiéndome de no hacer las cosas a tiempo. Después me di cuenta de que ese odio no hace olvidar, sólo te engaña, te ciega y te alivia. Pero cuando deja un mínimo hueco para el recuerdo, ahí están otra vez tus ojos color chocolate, hablando sin palabras y sintiendo sin corazón. Y vuelvo a aquel banco donde me juraste que sería para siempre y me tumbaste ese ocho. Sólo quería decirte que el muy jodido se ha levantado.